Tan sólo 37 días nos
separan del regreso de Luis Miguel a los
escenarios, y la expectativa entre los fans, por disfrutar de su
voz este 2014, se ve acrecentada ante los nuevos anuncios de
conciertos en Sudamérica, puntualmente en Argentina, país por el
que siente un cariño muy especial, según lo ha expresado en
diversas oportunidades. Como en viejos tiempos, Luis
Miguel recorrerá el país del tango con una gira por el
interior, la que lo llevará a cuatro ciudades confirmadas hasta
el momento -Buenos Aires, Córdoba, Mendoza y San Miguel de
Tucumán-, y con posibilidades de visitar Salta y Rosario según
fuertes rumores. Pero las novedades no concluyen ahí, pues desde
los sitios oficiales del promotor de los conciertos en México,
esta semana se ha informado que ‘El Rey’ se presentará en un
Palenque, espacios que forman parte de la cultura del país
azteca y están destinados prioritariamente a las peleas de
gallos, pero también son utilizados para brindar espectáculos de
música regional como tradición en las celebraciones de las
fiestas patrias. Esta noticia nos dejó boquiabiertos porque, de
concretarse, sería la primera vez para ‘El Sol de México’ en un
recinto de estas características.
En Palenques se han
presentado cantantes muy importantes de la talla de Juan
Gabriel, Vicente Fernández, Pepe Aguilar y Alejandro Fernández
entre otros, los que por cierto, son grandes referentes de la
música mexicana, así que era de esperar que tarde o temprano se
engalanaran con la presencia del máximo exponente que ha dado
México a nivel mundial. Sólo nos resta esperar a que esta
información se confirme, pues de ser así, seremos testigos de un
acontecimiento sin precedentes. Mientras tanto, cada uno de los
fans continuamos apreciando como avanza raudamente esa cuenta
regresiva que nos conducirá a renovar nuestros votos de amor y
de admiración hacia Luis Miguel, y el tiempo
corre más rápido si nos deleitamos con otra historia en la que
Miky se encarga, sin saberlo y sin quererlo, de rescatarnos a la
vida:
“Luis Miguel
querido, ¡Cómo explicarte lo que significas para mí!”.
Mi nombre es Adriana y
soy de Buenos Aires, Argentina. Conocí a Luis Miguel
desde el comienzo de su carrera, pero no fue sino hasta agosto
de 1983 que su luz me despertó. Sentí que gracias a él volví a
la vida, ya que en ese tiempo estaba muy mal porque mi papá
había muerto dos años atrás, y había entrado en un pozo
depresivo del que no sólo no podía salir, sino que me llevó a
tocar fondo. Pero, como les cuento, esta situación prevaleció
hasta que él apareció en mi vida, más precisamente el 13 de
agosto de 1983 cuando lo vi en un programa de TV hecho en
Argentina llamado ‘Sábado de Todos’.
Verdaderamente lo viví
como un milagro porque algo pasó, me envolvió su presencia, su
magia, su música, su luz y desde entonces mi vida cambió.
Luis Miguel me devolvió la alegría, la sonrisa,
las ganas de vivir y lo más importante, las ilusiones -algo que
siempre quise agradecerle.
Jamás olvidaré el día
en que lo vi por primera vez en el estadio ‘Obras Sanitarias’,
la calurosa noche del 14 de enero de 1984 para ser más precisa,
porque cuando irrumpió en el escenario quedé fascinada y no pude
evitar gritar: “¡Qué lindo es!”. Fue un show maravilloso, pues a
los trece años ya demostraba un amplio conocimiento en cuanto a
la manera de desplazarse en el escenario, como si lo hubiera
pisado toda la vida.
En el año 1985, cuando
ganó su primer Premio Grammy y salió galardonado con el segundo
puesto en el Festival de San Remo y con tanto éxito, nos visitó
para brindar un concierto en el estadio Luna Park, y aunque con
mucha ilusión adquirí mi entrada, luego no pude asistir porque
me enfermé de neumonía a pesar de que estábamos en pleno verano.
A causa de ello sufrí muchísimo y lloré todo el día, pero su luz
y su magia me reconfortaron enseguida. Luego la vida me
recompensó ese mal trago y el día 6 de septiembre de 1986, en el
Teatro Ópera, lo vi por primera vez en fila uno.
Desde entonces lo sigo
siempre, tengo sus vinilos, cassettes, CD’s, muchísimos videos
grabados con conciertos y notas, y tengo al presente un poco más
de quince mil fotos.
Siento que Luis
Miguel es mi ángel de la guarda y que soy el suyo
también, como creo que lo sentimos quienes lo queremos. Rezo
siempre por él para que esté bien, porque lo único que deseo es
que sea feliz y que siempre nos siga llenando el alma con su
música.
He vivido infinitas
cosas hermosas en estas más de tres décadas de seguirlo y
acompañarlo, por eso le agradezco que esté en mi vida y en la de
mi familia, quienes lo quieren muchísimo, en especial mi mamá
que lo adoraba. Mis sobrinas nacieron y crecieron escuchándolo,
y por supuesto que son mis fieles compañeras en cada uno de los
conciertos, porque para nosotras verlo es una fiesta.
Escuchar a Luis
Miguel es una caricia para el alma, y saber que está en
alguna parte es mi alegría porque es la lucecita que enciende mi
corazón siempre, pase lo que pase.
Gracias Micky por todo
lo que me das y por existir. Dios te bendiga.
Adriana Bonelli |